En un discurso breve pero lleno de contenido, Altieri destacó la motivación que siempre tuvieron los vecinos de Ostende, entre ellos una vecina que desde hace años participa de un merendero en uno de los barrios de esta localidad y que recibe el apoyo del municipio.
Recordó que en sus primeras gestiones de gobierno, las únicas calles existentes eran Víctor Hugo y el Camino Viejo y el resto médanos con senderos donde ni siquiera se podía transitar en bicicleta y los servicios no llegaban.

Desde entonces fue mucho el trabajo que se hizo, abrir calles, asfaltarlas, iluminar barrios, construir escuelas, edificios para la salud, para la policía hasta llegar a estos días, donde Ostende tiene vida propia, tiene centros comerciales, hotelería, todo bajo un proyecto urbanístico que permite lentamente acercarnos al concepto turístico que Altieri tiene como plan fundamental. Un plan que no se agota y que requiere de más tiempo. Resaltando que aquellas dificultades del principio, fueron justamente las que unieron a la comunidad, buscando entre todos soluciones de manera pacífica y a través del diálogo.

Altieri recordó que en esta oportunidad, cuando asumió hace un año y medio atrás volvió a tomar un estado en desgobierno, una comunidad dividida y en permanente conflicto.
Un municipio en bancarrota, sin combustible, sin maquinarias, sin ambulancias, con deudas enormes a los proveedores, con un personal desmotivado y con reclamos salariales, reflexionando que al día de hoy y con una meticulosa administración se logró alcanzar un equilibrio económico y financiero. Pero también se consiguió una estabilidad política y jurídica que provocó el regreso de los inversores y a su vez una mayor posibilidad de fuente laboral.

Altieri expresó su disconformidad por el estado del acceso a Ostende, y anunció que en unos días Nación estará cumpliendo con el pago a las empresas que llevan a delante el proyecto y así reactivar la obra.
Respecto a la ampliación del hospital, manifestó “los que critican, parece que les molesta que la ciudad crezca porque ni siquiera fueron a visitarlo“. En el plan de obras, que llega a los 500 millones pesos, mencionó entre otros, la ampliación de la Sala de Valeria, que se transformará en un pequeño hospital, al igual que la Sala de Ostende, y que más allá de brindar un servicio interno, hacen al proyecto turístico que se anhela, dado que el turismo que nos elige exige tranquilidad en ese respecto. Y continuando en esa tesitura, remarcó el regreso del posicionamiento de la marca turística, poniendo como ejemplo que durante la gestión anterior los turistas nos conocían por los bochornos sucesos políticos que hemos vivido.
Altieri anunció que el 5 de agosto se estará colocando la piedra fundacional de la UADE, un proyecto discutido y casi rechazado por el HCD, siendo esta universidad de turismo la más importante de Latinoamérica.

Finalmente, Altieri presentó a los candidatos a su lista, poniendo de relieve que los integrantes son en su mayoría jóvenes comprometidos con el proyecto de progreso y crecimiento establecido para Pinamar. Con puntales como Beba Covello, de una trayectoria indiscutible en la educación de nuestra ciudad.
Altieri expresó que la conformación de la lista tiene por objetivo integrar personas cuya misión sea trabajar apoyando proyectos basados en el fortalecimiento de la familia, célula fundamental para el desarrollo comunitario y fundado en la educación de nuestros niños y jóvenes a fin de asegurarnos un futuro promisorio, tal vez el mismo que soñaron nuestros pioneros.

Equipo de Comunicación
M.U.P.P.

Noticias dpinamar.com.ar

Viernes, 29 de Julio de 2011

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