Para Nuestra Patria el año 1816 fue decisivo, como eje fundamental de su destino. Los hombres que hicieron posible el proceso de Nacionalidad que se iniciara el 25 de mayo de 1810, solo usaron un arma, las ideas propulsadas por firmes convicciones, con pétrea determinación y con autentica vocación de amor a la Patria.
Los diputados que viajaron a Tucumán lejos de comodidades actuales, sorteando indescriptibles dificultades, tuvieron el mismo espíritu, iguales propósitos, similares intereses y estaban animados por un vivo sentimiento patriótico: SER NACIÓN, una Nación comprometida con el bien común e identificada con la verdad, la justicia y la paz.

El año 2010 nos encuentra aún sin lograr totalmente los ideales propuestos por los hombres de Mayo. La gran deuda Argentina es la deuda social, la erradicación de la pobreza. Sabemos que no hay DEMOCRACIA estable sin una economía con una justa distribución de bienes. Tenemos entonces que lograr un Estado transparente, eficaz y eficiente.

Solo el conocimiento de nuestros deberes cívicos, hará posible concretar acuerdos para un nuevo proyecto de país. Se requieren nuevas estructuras de participación que impidan la prepotencia de algunos, faciliten el dialogo constructivo para necesarios consensos sociales.
Así tendremos, frente al mundo el derecho de hablar de Soberanía, Igualdad y Libertad. Cantando a viva voz “CON GLORIA VIVIR Y MORIR” solo entonces habremos logrado nuestra total independencia.

Marisol Antúnez - Secretaria
María del Rosario Ana Pasero - Presidente

 Redacción dpinamar.com.ar
Viernes, 09 de Julio de 2010

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